sábado, 7 de junio de 2014

La Palma II: gastronomía

La Palma I: turismo / La Palma III: vino, cerveza y licores

En La Palma hay muchos lugares donde comer muy bien. En muchos restaurantes encontraremos pescados frescos, en particular vieja y alfonsiño. Otras especialidades de la isla son las papas arrugadas con mojo, el queso de cabra también con mojo o el conejo en salsa.

Ya mencioné el restaurante Playa Chica, junto a la playa de Puerto Naos, que dispone de una variada carta además de extraordinarias vistas sobre el mar. La ensalada de gambas acompañada de un malvasía afrutado era ideal tras una mañana de playa.


En Las Tres Chimeneas, situado en el municipio de Breña Alta, se disfruta de buena cocina tradicional en su comedor o en un precioso patio abierto en su centro. Nosotros probamos aquí el queso de cabra a la plancha con mojo verde y el conejo en salsa. Nos encantaron tanto el lugar como la comida.



En el Puerto de Tazacorte se encuentran varios restaurantes con especialidad en pescado fresco. Nosotros visitamos el Playa Mont donde probamos la vieja. Con una elaboración sencilla que permitía disfrutar plenamente de su sabor. Nos pareció delicioso. Además nos sirvieron un ejemplar grande, comparativamente con más carne y menos espinas. Un sitio muy recomendable.


Cambiando de estilo otro día comimos en un restaurante italiano, el San Petronio. Situado a las afueras de Los Llanos de Aridane disfruta de unas vistas espectaculares. En su carta llama la atención el apartado de pasta fresca casera. Pedimos un gazpacho muy adecuado en un día soleado y después disfrutamos de una riquísima mita o lasaña de setas.


Otra especialidad muy recomendable en La Palma son las arepas o tortillas de maíz con distintos rellenos. En realidad es una comida originaria de Venezuela. Pero la emigración en ambos sentidos ha hecho que en esta isla se encuentren varias areperas. Cenamos muy bien en la Arepera El Jable, de Los Llanos de Aridane. Allí probamos además las cachapas, también de harina de maíz, pero dulces. Aviso, las cachapas son muy ricas pero también muy grandes. Compartirlas puede ser buena idea.



Algo que conviene hacer antes de cualquier viaje es consultar la prensa local del sitio al que vamos (algo muy sencillo gracias a internet) y buscar la agenda cultural. Gracias a esa costumbre pudimos enterarnos de un evento tan interesante como Sonidos Líquidos, que se iba a celebrar en el Parador Nacional de La Palma. Reservamos con tiempo y así pudimos disfrutar de un gran concierto a cargo de O'Hara & The Southfish. Interludio musical a continuación.


Durante el concierto tuvo lugar una cata de vinos de la que hablaré en la tercera entrada de esta serie y después nos quedamos a comer en el mismo Parador. Un gran comedor con buena atención y buena comida, incluyendo un apartado de especialidades locales. Nosotros en este caso nos decidimos por el calabacín relleno y la ternera a la brasa. Excelentes. Una recomendación: dar un paseo por el jardín botánico del Parador.


Para finalizar comentaré el sitio más peculiar en el que comimos en esos días. Si no nos lo hubieran recomendado no creo que lo hubiéramos encontrado. Y si lo hubiéramos encontrado probablemente nos habríamos marchado a toda prisa sin entrar. Se trata de El Calamar, en un lugar llamado El Remo que pertenece al municipio de Los Llanos de Aridane. Junto a una playita ha crecido una pequeña población de manera totalmente desordenada. Y el mismo restaurante es poco más que un chiringuito de playa. Pero el lugar resulta ser muy agradable y recomendable su visita.


Y es que efectivamente su comida hace honor a su fama. Probamos sus imprescindibles calamares, que son en realidad chopitos (nos avisaron al pedirlos) y cuyo fino y crujiente rebozado nos pareció perfecto. Y también aprovechamos para probar el alfonsiño, fino y sabroso, de entre sus ofertas en pescado fresco. Lo acompañaron de unas papas con rico mojo verde.


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