sábado, 25 de noviembre de 2006

La estrella Subijana

Pedro Subijana, del restaurante Akelarre de San Sebastián, alcanza por fin la tercera estrella en la famosa guía francesa "Michelín". Lo cuentan aquí y aquí. También lo comenta Caius Apicius

B-Logia se alegra y felicita sinceramente al cocinero donostiarra, que tan grato recuerdo nos dejó cuando visitamos su casa. Fue entonces cuando nació este blog y por eso hoy nos alegramos con este más que merecido reconocimiento al buen hacer y la bonhomía de Pedro Subijana.

martes, 14 de noviembre de 2006

Un par de enlaces

Trasteando por ahí, he encontrado dos lugares interesantes:
http://www.lugardelvino.com: una web enciclopédica sobre el vino que incluye una tienda (¿te suena la idea, Guillermo?) y http://www.viticultura.es/ un buscador basado en Google pero que ofrece resultados sobre Viticultura, Enología, Bodegas y vinos.

También he localizado en la wikipedia los nombres (afrancesados) de las botellas de vino grandes: (el enlace es sobre champán, pero vale igual para vino, Vivanco dixit)
  • el octavo: de 9,4 cl (en desuso)
  • el cuarto: de 18,75 ó 20 cl , que en España se denomina "benjamín",
  • la media: 37,5 cl
  • el medium: 60 cl (en desuso)
  • la botella: 75 cl
  • el magnum: 1,5 l (2 botellas)
  • el jeroboam: 3 l (4 botellas)
  • el réhoboam: 4,5 l (6 botellas)
  • el mathusalem,: 6 L (8 botellas)
  • el salmanazar: 9 L (12 botellas)
  • el balthazar: 12 L (16 botellas)
  • el nabuchodonosor: 15 L (20 botellas)
  • el salomón: 18 L (24 botellas)
  • el souverain: 26,25 L (35 botellas)
  • el Primat: 27 L (36 botellas)
  • el melchizédec: 30 L (40 botellas)

jueves, 9 de noviembre de 2006

Nuevos tiempos, viejas costumbres.

Hubo un tiempo en que el vino se guardaba en pellejos y se bebía en botas. Hoy las botas son ya un vestigio arcaico y la botella bordelesa reina sin discusión. Sin embargo, los tiempos avanzan y los vinicultores buscan nuevas ideas para envasar el vino, como podemos leer en esta noticia del diario Expansión.

La prohibición de beber y conducir ha provocado una caída de las ventas de vino en hostelería. De ahí arranca el debate entre los partidarios de cambiar los envases y los partidarios de cambiar la idea de servicio: el vino por copas y no por botellas. Personalmente apuesto por el vino en copas: no me gustán los envases de plástico :-)